El pasado mes de julio, técnicos municipales del Ayuntamiento de Madrid, en colaboración con la Fundación Renovables, publicaron el informe Hoja de Ruta hacia la sostenibilidad energética. Un documento que marca las pautas a seguir para lograr la autosuficiencia energética en 2030 en el parque inmobiliario municipal, lograr un suministro de energía cien por cien renovable y autosuficiente, y alcanzar emisiones cero en sus edificios gracias, entre otras medidas, a la mejora de la eficiencia energética.
Objetivos, todos ellos, en sintonía con lo reflejado en el Plan A de Calidad del Aire y Cambio Climático.
Escenario actual
Para elaborar el informe, se ha analizado datos de 2016 de cómo se reparten los consumos energéticos (electricidad, gas natural y gasóleo C) en el parque inmobiliario municipal.
De los 1.600 edificios e instalaciones de los que dispone el Ayuntamiento de Madrid, se seleccionaron los 900 con mayor consumo, que suponen el 95% de la demanda de energía.
El coste total ese año sumando los tres tipos de suministros ascendió a 33.691.138 euros, el consumo ascendió a 346.324.970 kWh y las emisiones (kg CO2) a 96.326.586.
Mejorar en eficiencia energética y en “autosuficiencia”
El plan del Ayuntamiento de Madrid se basa en dos pilares fundamentales:
- – Escenario de eficiencia energética. Según refleja el documento, “la reducción de los consumos mediante la rehabilitación energética y la mejora de la eficiencia energética de los procesos supondrá reducir en un cincuenta por ciento la demanda de energía y la sustitución progresiva de combustibles fósiles por otros más eficientes”.
- – Escenario de autosuficiencia. El informe también recoge la intención del consistorio madrileño de “cubrir parte del consumo energético mediante la generación municipal de energía renovable fotovoltaica en el mismo punto de consumo”. Y también mediante “suministro eléctrico a partir de fuentes de energías renovables, generadas en emplazamientos lo más cercanos posibles al punto de consumo”.
¿Qué medidas de eficiencia energética se planean poner en marcha?
El documento refleja la intención del consistorio de aumentar en eficiencia energética en:
- – Iluminación: se apuesta por la automatización y el cambio a LED.
- – Climatización: se apuesta por mejorar los cerramientos, introducir bombas de calor reversibles y hacer mejoras de eficiencia en equipos de calor como calefactores eléctricos.
- – Agua caliente sanitaria (ACS): se propone potenciar la energía solar y mejorar la eficiencia de equipos obsoletos como los calentadores eléctricos.
“Si las premisas anteriores se cumplen, con el objetivo de reducir la demanda de energía un 50%, los edificios del Ayuntamiento de Madrid pasarían de los 346 GWh de 2016 entre electricidad, gas natural y gasóleo C, a un consumo de electricidad de 173 GWh en 2030”, explican los autores del informe.
“Así, la reducción en iluminación sería -45%, en climatización -55%, en ACS -60% y en otros -10%, lo que significaría un -50% con respecto a 2016”.
Hacia la autosuficiencia energética
Además de medidas de eficiencia energética, desde el Ayuntamiento apuestan por producir su propia energía, instalando paneles fotovoltaicos en azoteas de edificios municipales.
“ En concreto se han contabilizado más de 1,2 millones de metros cuadrados de azoteas en los 900 edificios municipales evaluados, de los que 735.000 serían aprovechables para instalar sistemas de autoconsumo fotovoltaico, con una potencia instalada de 75 MWp/año y una cobertura del 61% de la demanda de electricidad prevista en 2030”, explican.
Sistema de Gestión Energética
Para planificar y ejecutar esta transformación energética en el parque inmobiliario municipal, el informe señala la necesidad de implementar un Sistema de Gestión Energética Municipal (SGE), que coordine información, recursos y planes, junto con el desarrollo de las herramientas de gestión de los diferentes parámetros energéticos y llevar a cabo una serie de actuaciones.
Para ello el Ayuntamiento de Madrid tendrá en marcha un acuerdo marco para la monitorización de las instalaciones, la elaboración de auditorías energéticas y la elaboración de planes de actuación de eficiencia energética.